El frío extremo que azota al país no solo afecta a las personas, también pone en riesgo a nuestras mascotas, especialmente a los perros. Si tienes un perro, es fundamental que tomes precauciones para protegerlo del clima helado.
En este artículo te compartimos cómo el frío impacta a tu mascota y qué medidas puedes tomar para asegurarte de que esté cómodo y seguro durante esta ola polar ¡Sigue leyendo para descubrir cómo cuidar a tu mejor amigo en invierno!
¿Cómo afecta el frío a los perros?
El frío extremo puede generar incomodidad y hasta riesgos para la salud de los perros. Según el veterinario Marcelo Zysman, los perros tienen mecanismos naturales para adaptarse a las bajas temperaturas, como el cambio de pelaje, que se vuelve más grueso en invierno.
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Sin embargo, algunas razas, especialmente las de pelaje corto, pueden ser más vulnerables al frío. Los perros mayores, los enfermos o los que tienen condiciones como el hipotiroidismo también pueden ser más propensos a sufrir los efectos del clima gélido.
¿Cuáles son los síntomas de frío en los perros?
Los perros pueden manifestar varios síntomas cuando sienten frío. Los más comunes son temblores, orejas frías, nariz seca, letargo y una postura encogida. También pueden mostrar incomodidad al caminar, evitando moverse mucho.
Si su piel se pone irritada o seca, puede ser otra señal de que están sufriendo por el frío. Si notas estos signos, es fundamental actuar rápidamente y proporcionarles más calor.
¿Cómo proteger a los perros del frío extremo?
Para proteger a los perros en invierno, Zysman sugiere tres medidas clave:
- Primero, el ejercicio debe mantenerse, pero con paseos cortos y sin forzarlos a correr. Las caminatas deben ser suaves, especialmente en las mañanas o noches cuando las temperaturas son más bajas.
- Segundo, la alimentación debe ser ajustada, con alimentos más calóricos que ayuden a los perros a generar calor. Es importante consultar con el veterinario para ver si es necesario algún ajuste en su dieta.
- Tercero, un refugio adecuado es crucial para los perros que viven en el exterior. La cucha debe ser aislada y protegida del viento y la lluvia, utilizando materiales adecuados para mantener el calor.
Asegurar el bienestar de nuestros perros durante el invierno es responsabilidad de los dueños. Proporcionarles refugio, alimentación adecuada y ejercicio moderado son pasos fundamentales para mantenerlos seguros y saludables en condiciones extremas.