En Yordi en Exa, la pedagoga Alicia Rábago, platicó sobre las relaciones tóxicas con los hijos cómo se manifiestan y cómo solucionarlas.
La afirmación 'nadie nos enseña a ser padres' resuena con verdad, pues cada etapa junto a los hijos es una nueva travesía. Es fundamental discernir los mensajes que queremos transmitirles y reconocer las relaciones que cultivan con personas cercanas, evaluando si estas son saludables o nocivas.
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Señales de que tu hijo está en una relación tóxica
Identificar si tu hijo está en una relación tóxica puede ser una tarea complicada, pero es crucial estar alerta a ciertas señales que podrían indicar problemas. La pedagoga Alicia Rábago nos dirá algunas pautas para ayudarte a reconocer si tu hijo está en una relación perjudicial.
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Cambios en el comportamiento.
Observa si tu hijo ha experimentado cambios significativos en su comportamiento, como volverse más retraído, irritable o deprimido. Los cambios bruscos de personalidad pueden ser indicadores de que algo no está bien en su relación.
Aislamiento social.
Si notas que tu hijo se aleja de sus amigos y familiares, y comienza a pasar la mayor parte de su tiempo con su pareja, esto podría ser una señal de que la relación está monopolizando su vida social. El aislamiento es común en relaciones tóxicas, ya que el agresor a menudo intenta aislar a la víctima de su red de apoyo.
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Manipulación emocional.
La manipulación emocional es una táctica común en relaciones tóxicas. Tu hijo podría estar siendo manipulado para sentirse culpable, avergonzado o inseguro. Fíjate si su pareja lo desprecia, lo menosprecia o lo culpa constantemente, y si tu hijo parece cuestionar su propio valor como resultado.
Dependencia emocional.
Observa si tu hijo parece depender emocionalmente de su pareja, incluso cuando la relación es claramente dañina. La dependencia emocional puede hacer que sea difícil para tu hijo dejar la relación, incluso cuando reconoce que no es saludable.
Baja autoestima.
Las relaciones tóxicas pueden socavar la autoestima de tu hijo, haciéndolo sentir inadecuado o indigno de amor y respeto. Presta atención a cualquier señal de que tu hijo duda de sí mismo o de su valía como persona.
¿Cómo ayudar a mi hijo si está en una relación tóxica?
Alicia Rábago comenta que si observas algunas de estas señales en la relación de tu hijo, es importante abordar la situación con sensibilidad y compasión. No debes prohibirle, sino hacerle que él analice la situación y vea lo que está mal.
Debes animar a tu hijo a hablar abiertamente contigo sobre sus preocupaciones y ofrécele tu apoyo incondicional. Ayúdalo a comprender que merece una relación saludable y amorosa, y que no está solo en esta situación. Si es necesario, busca la ayuda de un terapeuta o consejero especializado en relaciones abusivas para brindar el apoyo adicional que tu hijo pueda necesitar.