Tener conocimiento de una explosión estelar puede resultar un tanto alarmante, sin embargo, desde la Tierra podemos ser testigos de una, sin que represente algún tipo de riesgo, así que aquí te decimos todo lo que debes saber.
Este 2024 se caracteriza por una serie de eventos astronómicos que no podemos dejar pasar, tales como eclipses lunares, e incluso uno total de Sol el próximo 8 de abril, pero también, debemos estar pendientes para un “nuevo” destello.
¿Qué es una explosión estelar?
De acuerdo con la NASA, esta se produce con el choque de dos cuerpos celestes, específicamente cuando una nova estalla.
Te podría interesar
La nova, es aquel cuerpo estelar que se origina dentro de las supernovas tipo I, que son un “sistema binario de estrellas”, a decir de la agencia espacial estadounidense.
Sin embargo, se distinguen debido a que debe existir una enana blanca de carbono y oxígeno, así como una estrella de otra clase, que pudiera ser una gigante roja pero, a diferencia de las supernovas, los objetos celestes que participan en la nova, sobreviven.
Te podría interesar
Lo anterior también quiere decir que después de una explosión, se pueden provocar más, e incluso después de varios años.
Y es que, según los expertos, la enana blanca es atraída por la materia gaseosa que envuelve a la gigante roja, al momento de la colisión, la estrella aumenta su luminosidad al grado en que podremos apreciarlo desde nuestro planeta.
¿Cuándo ocurrirá el fenómeno astronómico?
La NASA refirió en febrero pasado que la explosión estelar o estallido de la nova sucede alrededor de cada 80 años, motivo por el que la de este año será una oportunidad única para todos.
T Coronae Borealis, o T CrB, es la protagonista de este evento astronómico y se localiza a tres mil años luz de la Tierra, aunque la última vez que se tuvo registro de una explosión, fue en el año de 1946.
No obstante, astrónomos señalan que este fenómeno se podrá ver a simple vista entre febrero y septiembre de 2024.
La explosión estelar se debería ver en la constelación Corona Boreal, pero no habrá porqué alarmarse, ya que aparecerá como una “nueva estrella”, con un brillo similar al de Polaris, que poco a poco dejará de ser observable.