DEPRESIÓN SONRIENTE

Depresión sonriente: ¿Qué es, cuáles son sus síntomas y causas?

La depresión sonriente es una de las más difíciles de diagnosticar por su contradicción. Conoce cuáles son sus síntomas, causas y tratamiento.

Depresión sonriente: ¿Qué es, cuáles son sus síntomas y causas?
Psicología.Depresión sonriente: ¿Qué es, cuáles son sus síntomas y causas?Créditos: Producción Exa FM
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Frecuentemente, la depresión se asocia a sentimientos o síntomas de tristeza, angustia, ansiedad, desesperación, dolor o letargo. Sin embargo, lo que muchas personas quizás no saben es que también existe la depresión sonriente.

Tal como indica su denominación, este grupo de afecciones es contradictoria. Esto se debe a que una persona puede padecerlas y manifestar una imagen alegre o de bienestar. Conoce de qué se trata este trastorno mental. Estas son sus causas, síntomas y tratamiento.

¿Que es la depresión sonriente?

La depresión sonriente es un conjunto de afecciones anímicas que vive una persona, que se siente de manera angustiosa o triste internamente y se muestra perfectamente feliz o contenta con los demás. La vida pública de quien la padece es normal o incluso idílica. Según Eva María González, psicóloga de Psicólogos Sexólogos Zaragoza y miembro de Doctoralia:

 “En la depresión sonriente se experimenta una depresión de forma oculta. Esto se debe a que la persona no exterioriza su bajo estado de ánimo y trata de aparentar normalidad. Incluso aunque se le pregunte si le sucede algo”

En otras palabras: la persona vive como si realmente no le pasara nada, cuando realmente no es así. Esto hace que su sufrimiento aumente, hasta que llega el día en que no puede soportarlo más y se desborda emocionalmente. En muchos casos no ve otra salida que el suicidio.

El paciente que sufre depresión sonriente puede parecer ante los demás alguien alegre, con una rutina normal, activa y sociable. Foto: Canva

Síntomas de la depresión sonriente

  • Tristeza profunda y prolongada
  • Cambios en el apetito, peso y sueño
  • Fatiga
  • Sentimientos de desesperanza
  • Baja autoestima
  • Pérdida de interés o placer en hacer cosas que antes aportaban felicidad
  • Dormir muchas horas
  • Irritabilidad
  • Susceptibilidad a la crítica y el rechazo
  • Sentir que tener signos de depresión sería un signo de debilidad
  • Negación de la depresión

Sin embargo, una persona puede tener depresión sonriente y no manifestar ninguno de estos síntomas en sociedad. Para alguien que percibe al paciente sin saber lo que esconde, este puede ser activo, alegre y optimista, y también puede llevar una rutina estable con la familia, pareja o amigos.

En este sentido, es importante hacer una comparación. Un síntoma depresivo típico es tener la energía baja y tener dificultades para salir de la cama. En la depresión sonriente, los niveles de energía pueden no verse afectados. Por este motivo, el riesgo de suicidio puede ser mayor.

Las personas con depresión avanzada pueden tener pensamientos suicidas, pero quizás no tienen la energía para ejecutarlos. Pero alguien con depresión sonriente puede tener la energía y la motivación para seguir adelante con esas ideas

La depresión sonriente es difícil de diagnosticas. Muchas veces el paciente no sabe que tiene depresión y no acude al profesional de la psicología. Foto: Canva

Causas y tratamiento de la depresión sonriente

Según Eva María González, quien tiene depresión sonriente es alguien perfeccionista que no se permite cometer errores. Se autoexige y responsabiliza por todo y debe tener el control de todo lo que lo rodea. El paciente suele ser introvertido y le cuesta hablar de sus problemas.

Este tipo de trastorno depresivo puede tener como causa una relación fallida o la pérdida de un empleo. O simplemente no cumplir con las expectativas externas. Según un artículo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la afección presenta síntomas tan contradictorios a los de la depresión clásica, que puede complicar el proceso de diagnóstico.

De hecho, muchas personas ni siquiera saben que están deprimidas y por lo tanto no buscan ayuda. Cuando ya no pueden disimular por más tiempo su sufrimiento, acuden al psicólogo y se puede realizar una terapia psicológica que puede incluir apoyo farmacológico.